Tengo estas fotitos desde hace casi dos meses y ya era hora de hacerme un huequito para escribir el post de esta bonita experiencia! Me gusta aprender todo tipo de técnicas para luego quedarme con la que más se ajusta a mi forma de trabajar así que este año ha sido uno de los más productivos sin duda! Mi primer post de aprendizajes de estructuras se lo dedico al Elefantito y conejito que hicimos con Sharon Wee en Madrid en la escuela de Alma. Miren que cosa más bonita…
Qué contenta me fui yo con mi mini zoológico a casa, no pude cortarla nunca! Era superior a mi! Jajaja!
Mi elefantuqui comenzó siendo un trozo de queque/bizcocho que poco a poco iba creciendo y tomando forma! Hasta el momentazo de cubrirlo con una golosa capa de ganaaacheeeee de chocolate negro!!! Se me hace la boca agua nada más pensar en él!!! Miren cómo quedaría justo antes de comenzar a cubrir!
Y yo tan feliz…con la espalda rota pero como dice mi madre, sarna con gusto no pica y, si pica, no mortifica!
Seguimos «dalequetepego» a nuestro mini zoo. Tocaba darle forma a este cilindrín de bizcocho de chocolate para convertirlo en…!!!! Un simpático conejillo que no tenía otra cosa que hacer que encaramarse a la trompa del elefante! Es que desde lo alto todo se ve mejor…
Y ahí arriba los ven, los conejillos esperan en la balda superior a que los vistamos, al igual que los educados elefantes que se quedaron donde les dejamos durante la mañana…jeje, porque mientras, con cuchillo y lima poníamos todo perdido de bolitas de corcho de esas de las que no hay manera de zafarse luego para esculpir el cupcake que haría equilibrios en el extremo de la trompita.