¡¡¡QUE VIVAN LOS NOVIOS!!! ¡Viva! Sííí! Es mi primera tarta nupcial y, por lo que pueden ver, no es de lo más tradicional, sino repleta de color y desbordante de vida, como nuestros chic@s que se nos han casado, Sandra y Jorge. ¡Guapos!

    Sandra es mi compi de trabajo desde hace un año. A los pocos meses de conocernos me dijo que se casaba, que su chico le había PEDIDO MATRIMONIO de una forma taaannn romántica… en GLOBO!!! Y claro, no pude evitar comentarle que me encantaría hacerles una Jessitarta! Y Sandra respondió que sería genial. Así que pensamos que qué mejor tema que un globo aerostático, eso sí, había que darle vidilla, y ya yo tenía en mente la escena: tenía claro que Jorge iba a estar COLGANDO con cara desencajada! Jajaja! Perdóname Jorge!

    A Sandra no le encontré papel interpretativo hasta dos días antes de la boda. Sabía que ella iba a estar o agarrando a Jorge para subirlo al globo o… ¿Por qué no? Más feliz que una perdiz con ahí arriba! Al viento! Eso sí, ambos unidos por una cuerdecita, ENLAZADOS, pero cada uno viviendo una experiencia inolvidable! 😉 Y vaya que si lo sería!


    Y aquí les ven, SUS «CARETILLOS» son pura EXPRESIVIDAD!
      Y aquí tienen a los de verdad. Una expresividad, unas CARITAS (las de verdad) que lo decían todo. Fue un día muy especial, pero que los novios nos han hecho disfrutar desde hace 100 días en una cuenta atrás, a través de las redes sociales, de lo más simpática, participativa y divertida, igual que el día de su boda!
    Sandra, Jorge, gracias por regalarnos un día inolvidable. Y ya no les digo por hacerme partícipe de la manera que mejor sé, de poner mi granito de arena con el que contribuir a hacer más dulce, si cabe, un día tan especial.

Una perspectiva diferente de la Jessitarta, en picado, desde arriba…

    Esta foto la añado para que vean otra perspectiva, esta vez lateral, así se aprecia mejor el VOLUMEN de la tarta globo…
   Y llegó el MOMENTO DE… ¡¡¡CORTAR Y COMER!!! Qué penita! Que nooooo! Que lo suyo es que no quede ni una migaja!!

       Si algo me queda claro cada vez que elaboro una tartita, es que me hace feliz, no sólo por lo que disfruto diseñando y haciendo cada detalle, sino por el regalazo que es que este trabajo arranque sonrisas y endulce instantes únicos de quienes comparten cada pedacito del pastel con la gente especial con la que comparten su vida.   Espero que les haya gustado! Muuucho! Y muuucho cariño para todos!!!

    Besitos!!!
    JESSI